El ICE está recurriendo a distintos trucos y engaños. En vez de identificarse como el ICE, se hacen pasar por agentes de policía o de libertad condicional (probation). Usan tácticas de intimidación para forzar su entrada en los hogares. Cuentan historias falsas con la intención de que las personas salgan de sus casas o que les permitan la entrada.
Las comunidades que conocen sus derechos pueden legalmente evitar que ICE entre en sus casas, y pueden protegerse a sí mismos, a sus vecinos y a sus seres queridos.